20 Dic Qué deben transmitir las etiquetas para bebidas

Cuando nos acercamos a cualquier tienda o supermercado con la intención de adquirir un producto, lo que más llama nuestra atención es su aspecto exterior. Y el etiquetado es la mejor carta de presentación de un artículo, pues es el que logrará que destaque visualmente. La forma de la etiqueta, su imagen o sus colores, nos permitirán encontrar rápidamente el producto que buscamos entre todos los que llenan las estanterías del establecimiento. Incluso si se trata de algo que nunca hemos consumido, esa etiqueta servirá como reclamo para hacernos pensar “voy a probarlo”.  

Índice de contenidos

• • Las etiquetas para bebidas
  • 3 características esenciales de las etiquetas para bebidas 
  • ¿Qué hace Rieusset al respecto de las etiquetas para bebidas?
    

Las etiquetas para bebidas

Y esto sucede aún más con las bebidas que con los alimentos, pues al no ser productos tan necesarios y estar más vinculados al ocio, nos encuentran más dispuestos a probar cosas nuevas. Cuando elegimos un vino, un refresco, una bebida energética o una espirituosa, lo hacemos de una manera, digamos… “más relajada”. Por eso, las etiquetas para bebidas juegan un papel crucial en nuestras decisiones de compra. ¿Quién no ha adquirido una nueva botella de agua, un refresco o una cerveza que nunca antes había consumido por lo mucho que le han llamado la atención las etiquetas de esas botellas?

3 características esenciales de las etiquetas para bebidas

Elaborar etiquetas para bebidas no es una tarea sencilla, pues tienen que reunir tres características de enorme importancia: diseño, sostenibilidad e información.

• Respecto al diseño de las etiquetas para bebidas, ¿qué podemos decir que no se haya dicho ya? Su forma, su tipo de letra, su color… han de ser tan atractivos que hagan que esa bebida nos entre por los ojos y logre seducirnos, para que como consumidores, elijamos ese producto de entre todos los demás. El mercado está lleno de ejemplos de éxito en lo que respecta al etiquetado para botellas. Refrescos como Coca-Cola, Pepsi o Red Bull, por ejemplo, son inconfundibles en cualquier estantería de supermercado. Y lo mismo ocurre con algunas cervezas (Cruzcampo, Heineken, Coronita, Mahou, Damm…), con las bebidas espirituosas (Martini, JB, Larios…), con el agua (Font Vella, Solán de Cabras…). Los etiquetados de todas esas botellas las convierten en productos inconfundibles, únicos, logrando que los fabricantes aumenten el prestigio de su marca al mismo ritmo que lo hacen sus ventas. 

     Imagen extraída del portal oficial de la marca. 

Otra cuestión muy importante a tener en cuenta a la hora de diseñar etiquetas para botellas, es el público al que van dirigidas. Un claro ejemplo lo tenemos en el público infantil, pues los niños se han convertido en grandes consumidores dentro del ámbito familiar. Teniendo en cuenta que el aspecto visual les llama la atención incluso más que a los adultos, las etiquetas para botellas infantiles han de conseguir que el niño desee ese artículo. Por eso se recurre a dibujos de animales, o a películas y personajes de moda, del tipo Frozen, Kung-Fu Panda, o Superhéroes de lo más variado. Más que el producto en sí, los niños buscan las emociones que dicho producto les transmite, de ahí la importancia que tiene el etiquetado para botellas infantiles.

Imagen extraída de la web de Font Vella de su campaña Pack Frozen 2 de 3 Botellas 0,33L

• Otro requisito de enorme importancia en el sector del etiquetado para bebidas es la sostenibilidad. Sobre todo desde que ha aumentado la conciencia medioambiental entre consumidores y fabricantes. La única vía para que la economía de consumo no termine devorando el planeta (y a nosotros con él) es precisamente la del consumo sostenible. Por eso es necesario poner en el mercado materiales que faciliten el reciclaje de botellas y envases, que limiten las emisiones de CO2 en su producción.
  
• El tercer punto imprescindible que deben cumplir las etiquetas para botellas es el de proporcionarnos toda la información sobre el producto que nos corresponde tener como consumidores; por supuesto, adaptándose a lo que la legislación exija en cada momento al sector del etiquetado. Esa posibilidad de recibir datos veraces es lo que permitirá al consumidor tomar decisiones responsables a la hora de adquirir un producto, y a la vez cuidar su salud y la de su familia.

Pero, ¿qué información deben contener las etiquetas para botellas? Los datos que deben incluir son los siguientes: nombre de la bebida (vino, zumo, cerveza…), listado de ingredientes, contenido neto, fecha de caducidad, datos de fabricante y distribuidor, descúbrelos todos. 

El Reglamento nº 1169/2011, que entró en vigor en diciembre del 2014, también exige que los países de la Unión Europea añadan otro dato más a las etiquetas de los productos elaborados: su valor nutricional. Puedes ampliar la información al respecto en nuestro artículo Claves del etiquetaje de bebidas ¡Descúbrelas! 

¿Qué hace Rieusset al respecto de las etiquetas para bebidas? 

Rieusset llevamos años fabricando etiquetas para botellas y cumpliendo cuidadosamente con esos tres requisitos que se exige a todo buen etiquetado. 

Comprometidos con el medio ambiente, Jordi López, director general de Rieusset S.A., declara en la revista NewPackaging que “Al nivel de proceso ya instalamos en 2008 una planta de recuperación de solventes de forma que no incineramos los COVs que vienen del proceso de impresión sino que recuperamos el acetato de etilo que contienen para volverlo a introducir en el proceso”. 

Además afirma que, en términos de producto, Rieusset trabaja en función de lo que solicita el cliente y suministra etiquetas hechas con materiales reciclados, caso del papel, como de materiales biodegradables, caso del PLA. 

Por otro lado, cada vez son más los clientes que solicitan a Rieusset el uso de sleeves. Los sleeves permiten vestir las botellas con un gran traje que destaca respecto al resto de envases con elegancia mientras, al mismo tiempo, da acceso a mucha información por ser más grande que las etiquetas convencionales. De esta forma, el producto destaca en el lineal y permite al productor de la bebida hacer branding, señala también Jordi López. 

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